Cuando presumimos que la vida llega,
La vemos de lejos, no nos convencemos.
Se vuelve tan lejano lo que no tenemos
Y la vida misma se vuelve una espera.
Luego decidimos asomarnos un poco,
Comprobar si es cierto que ella es tan cierta
Descubrimos pronto, que es puerta abierta
Por donde pasamos, si es que estamos locos.
Entonces sin más, el milagro existe
La vida se muestra grande… tan vibrante
Perdemos el miedo como esos amantes
Que ante lo que sienten, ya no están más tristes.
✨💐✨🍁✨🌺✨🌻
La vida está ahí, aunque simplemente la obviemos. No viene con ofertas de engaño, ni con poses para selfies; ella, se presenta día a día con su cara limpia, para ser vivida por todo el que quiera.
No es azar, ni es casual que la tengamos, por eso el segundo, el respiro y todo lo que podamos experimentar en este momento es valioso, tanto, que es digno de atesorarlo.
Nuestra falta de atención no la disminuye, ni quita su propósito, simplemente los que no están atentos, se la pierden con la certeza bien segura de que ya no tendrán más oportunidad de tenerla. Al menos no exactamente como cuando se dejó pasar…
La vida, esa la constante, la que sonríe a pesar de nuestra ceguera de a ratos, hoy amanece una vez más, como siempre, con ganas de invitarnos a soñar.
Es una profunda reflexión Awilda, aunque creo que para vivir feliz hay que ser un inconsciente y no atesorar momentos. Un besazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
¿La de siempre? Lo parece, pero cada día es distinta. Para eso estamos aquí…de lo contrario sería muy , pero que muy aburrida. Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona