Agosto que se va…

Mientras Agosto de forma pausada se va… sin hacer ruido, con la sensación de que le faltó algo; quizás una emoción que se quedó dormida en cuarentena, una palabra que no pudo decirse personalmente, un sin sabor que termina sabiendo a nada.

Yo… le miro con nostalgia al marcharse….

Pero entiendo que también le toca irse. Como un visitante que tuvo su tiempo y ahora se vuelve a algún lado que no conocemos, emprende su partida.

Y quizás no fue su mejor experiencia, ni la nuestra tampoco. Nadie imaginaba que este encuentro en este año iba a ser de esta manera. Imposible pensar para el humano que algo así nos pasaría. Pero las cosas no pasan, hasta que pasan.

Todo es incierto… y quizás empezar a tener eso como perspectiva, nos ayude a valorar más esos segundos de certeza que tenemos; ese sentimiento que a veces aparece en nuestra alma de forma inédita y nos recuerda la verdadera forma de estar vivos.

Eso puede ocurrir, es una posibilidad, o tal vez no. Quizás exista alguien que quiera seguir en lo mismo posdatando para después un tiempo, un sentimiento una vida… que no le pertenece.

Sabes? creo que no seremos los mismos (tu y yo) cuando nos volvamos a ver.

Agosto 31; 2020 6:55 am

Todo ocurre…. y yo respiro 💭

Nada más difícil o más duro, que sentir como se escurre la vida entre las manos y estar distante de lo que se quiere.

La vida es una encrucijada continua. Si vas por un camino, abandonas otro; si eliges a alguien excluyes al resto, si te dedicas a una cosa de una forma íntegra, descuidas todo lo demás. Somos de atención limitada y nos damos más cuenta de esto, cuando somos los olvidados en lugar de quienes olvidan.

Pareciera todo una constante dicotomía, pero ese “todo” es humanamente más complejo que un “si” o un “no” ya que en medio de estas dos palabras tan pequeñas (con significados que han cambiado muchas vidas); existen muchos matices y palabras posibles entre una y otra.

De pronto estamos ante el cielo y algunas veces se deja contemplar tan cercano, dando la sensación que alcanzarlo con nuestra propias manos es posible, para luego bajar de la cúspide de las emociones y encontrarnos con que la realidad nos golpea haciéndonos entender que estamos bien, pero bien lejos de eso que nos encanta.

—¿Quién podría tener las respuestas? ¿Quién es ese que aún siendo humano lo conoce todo? la respuesta es evidente para cada uno. Nadie (lo que incluye a todos) tiene lo necesario para decir que “ya está listo”.

A veces terminamos colgando los sentimientos en el closet del olvido, pero cada vez que queremos o más bien necesitamos estar vivos, pasamos por el pasillo de la vida, y “sentimos “ como ellos se mueven, aún estando bien guardados.

En fin, la vida se escurre… entre encierros y distancias, entre ausencias y nostalgias, entre cuentos que nunca llegarán a finales felices. Y esto no se debe a un “separador” que le han dado nombre de rey al ponerle <corona>. No, esto ocurre porque lo que se siente termina no siendo suficiente para quien le da la espalda.

Y mientras todo esto ocurre… yo, respiro.

Agosto 11; 2020. Día largo que transcurre viéndole de lejos…

Agosto pocos días… incertidumbre

Agosto se asoma con cuidado… días difíciles también le tocan a él. El siempre ha sido de veranos, de vacaciones y días libres, de jolgorios y fiestas o de inicios de mucho frío en otro lado del mundo. Pero en torno suyo, ha estado el movimiento constante.

Nada en su haber de días de encierro, de ausencia de personas, de viajes que se posterguen hasta no saber cuándo. Él ha sido de los que animan, de los que inventan, de los que se lanzan en parapente o van a esquiar sobre cualquier montaña que se cubra de nieve.

Ahora, le toca contemplar sus pocos días de recién llegado, muchas veces desde la ventana, con incertidumbre de lo que ocurre afuera. Tantas voces, tantas muertas, tantas estadísticas, tantas noticias, y en muchos casos… tanta ausencia de verdad.

Como el resto de casi todos los meses de este famoso año, 2020; Agosto también es objeto de dudas y la incertidumbre hace nido en la cumbre de sus días.

Y nosotros… hemos reído en días de Agosto, hemos viajado, llegado a un sitio nuevo, experimentado la vida soplándonos con brisa cálida o fría, lo hemos pasado bien. Sin embargo, también la vida en su plenitud, trae la otra cara de la moneda, aquello que puede completar una verdadera perspectiva de que existimos.

En este Agosto, así como hemos conocido antes la Alegría de nacimientos, veremos con tristeza el adiós en los ojos ya cerrados de alguien, en el cambio de horizonte en algunos caminos, en distancias que aparecen y ya no podemos controlarlas.

Se marchitarán flores que en otros tiempos existieron, porque todo ha ido cambiando, el planeta ha sufrido daños quizás irreparables, el ser humano ha vivido pruebas que a cualquier otro ser del universo le hubieran hecho cambiar radicalmente… al humano, no tanto…

Estamos en medio de todo esto, y Agosto me mira con cara de incertidumbre… y yo le devuelvo la misma mirada, tomo su mano de forma compasiva y le digo: —Ambos vamos juntos en esto, tranquilo. Y la tranquilidad no es precisamente la amiga más cercana, pero toca confiar que no depende todo nosotros, porque si así fuera, ya el mundo no existiera.

Agosto…. “ocho”, mes par, redondo…. favorito… sigamos de la mano, admirando la vida, encontrando que a pesar de cualquier cosa, importa lo que nos ocurre adentro.

Gracias porque sé, que tú también estás conmigo. Tú estás, y es importante, aunque estemos distantes.

Agosto 2 y 3; 2020. Mientras hoy en el camino.